Viernes 17 de agosto de 2018
Tema: Tannhauser Pilgrims Choir Artista: DR SymfoniOrkestret
Y por fin, llegó el día. Sabemos que murió Aretha Franklin, que la serie de Luis Miguel sigue dando que hablar (spoiler para la 2ª temporada: nunca encontraron a la madre), y tantos temas más.
Pero esa fuente de la sabiduría, esa base de la civilización occidental que son los cartoons de Warner nos dejó una fijación. Resulta que en el episodio “What’s opera, Doc?” la tradicional lucha entre Bugs Bunny y Elmer se desarrolla en el entorno de las óperas de Wagner. Más exactamente en su obra coral Der Ring des Nibelungen (El anillo del Nibelungo).
Esta obra es fundacional de la ópera, y tan enorme en su concepción que es difícil de aprehender. Técnicamente no es una ópera, es un drama épico musical. Lo componen una obra introductoria, y tres óperas.
Algunos datitos: la obra está pensada para ser interpretada en cuatro días, como se hace desde 1876 en el Bayreuth Festival (interrumpido entre 1946 y 1951 por razones de público conocimiento). Incluye unas 15hs de interpretación, dependiendo del tempo que le imponga el director. Le llevó a Wagner unos 26 años escribirla (con interrupciones). Considerando que el tema del verano promedio lleva unos 26 segundos armarlo en computador, entendemos algo de la cultura actual.
Y en una de esas interrupciones, Wagner se tomó un ratito para componer Tannhäuser und der Sängerkrieg auf Wartburg, "Tannhäuser y el Concurso de Cantores de Wartburg”.
En “What’s opera Doc” se mezclan temas de varias obras de Wagner. En el dueto de amor entre Brunilda (Bugs) y Sigrifido (Elmer) se usa un tema llamado “Canto de los Peregrinos”, que es de Tannhäuser.
El tema es entonado por los peregrinos que llegan a Roma en busca de absolución, combina las voces de los jóvenes (coro femenino) y los viejos (coro masculino), y es de un volumen pocas veces (si alguna) equiparado. La letra indica la esperanza de la redención al final del largo camino, que es la vida.
Muchos, muchísimos, dicen “Como Wagner era ateo…” y eso se toma como verdad. Lo cierto que definir si Wagner era cristiano es complicadísimo y supera ampliamente estas humildes líneas. Sin dudas era anti-papista, bautizado luterano, y era en todo caso un cristiano cultural como era habitual entre los europeos de su época. Era por sobre todo un romántico, absolutamente obsesionado con la complejidad humana, el amor y la capacidad del hombre de salvarse y condenarse. Wagner decía que Dios no creó el hombre, sino que el hombre creó a Dios. Así que los invitamos a leer, y mucho, antes de poder siquiera tener opinión sobre el tema.
Siendo que el domingo es el día del niño tal vez alguno de Uds se tome el trabajo de, en algún momento, pedirle a sus hijos que escuchen este tema, o alguno parecido. Son algo así como 6:30 minutos. No parece mucho pensando las horas de “las manitas para arriba, y meneo el culito” que escuchan, o les hacen escuchar. Hay que pensar que toda la música comercial y efímera, todo el reggaetón, a sus hijos se la van a meter por el… cráneo a la fuerza, todo el día y todos los días. Tal vez sea buena idea comentarle “Mirá, esto existe. Esto es una cosa que tal vez un día te guste. Escuchalo una vez, nomás”
Probablemente me digan que ni eso es posible. No sé. Todavía puedo creer en los milagros.
El tema empieza con una parte coral pura, luego se van plegando magistralmente los instrumentos hasta llegar a una explosión musical que solo un genio podía lograr. Las maderas (violines, violas, chelos) llevan un sincopado que, si se escucha solo, no puede armonizar nunca con la melodía que lleva el coro. Pruébenlo. NO da. Es imposible. Pero de alguna manera pasa. Y después dicen que Wagner era ateo…
Siempre les digo, mis queridos chichipíos, no busquen a Dios en una zarza ardiente, ni en querubines pasados de peso, ni en una paloma blanca. Dios está en las pequeñas cosas, en los gestos, en los eventos de cada día y muy probablemente, en un momento de escuchar a Wagner.
Por eso, dándole gracias a Dios por los cartoons de Warner, y por Wagner, les deseamos buen fin de semana (largo) y les dejamos el Coro de los Peregrinos en la excelente interpretación de la orquesta DR SymfoniOrkestret de la Radio Danesa, con la dirección de Lawrence Foster.
Peace. Pilgrims. Out.
WEG
Pero esa fuente de la sabiduría, esa base de la civilización occidental que son los cartoons de Warner nos dejó una fijación. Resulta que en el episodio “What’s opera, Doc?” la tradicional lucha entre Bugs Bunny y Elmer se desarrolla en el entorno de las óperas de Wagner. Más exactamente en su obra coral Der Ring des Nibelungen (El anillo del Nibelungo).
Esta obra es fundacional de la ópera, y tan enorme en su concepción que es difícil de aprehender. Técnicamente no es una ópera, es un drama épico musical. Lo componen una obra introductoria, y tres óperas.
Algunos datitos: la obra está pensada para ser interpretada en cuatro días, como se hace desde 1876 en el Bayreuth Festival (interrumpido entre 1946 y 1951 por razones de público conocimiento). Incluye unas 15hs de interpretación, dependiendo del tempo que le imponga el director. Le llevó a Wagner unos 26 años escribirla (con interrupciones). Considerando que el tema del verano promedio lleva unos 26 segundos armarlo en computador, entendemos algo de la cultura actual.
Y en una de esas interrupciones, Wagner se tomó un ratito para componer Tannhäuser und der Sängerkrieg auf Wartburg, "Tannhäuser y el Concurso de Cantores de Wartburg”.
En “What’s opera Doc” se mezclan temas de varias obras de Wagner. En el dueto de amor entre Brunilda (Bugs) y Sigrifido (Elmer) se usa un tema llamado “Canto de los Peregrinos”, que es de Tannhäuser.
El tema es entonado por los peregrinos que llegan a Roma en busca de absolución, combina las voces de los jóvenes (coro femenino) y los viejos (coro masculino), y es de un volumen pocas veces (si alguna) equiparado. La letra indica la esperanza de la redención al final del largo camino, que es la vida.
Muchos, muchísimos, dicen “Como Wagner era ateo…” y eso se toma como verdad. Lo cierto que definir si Wagner era cristiano es complicadísimo y supera ampliamente estas humildes líneas. Sin dudas era anti-papista, bautizado luterano, y era en todo caso un cristiano cultural como era habitual entre los europeos de su época. Era por sobre todo un romántico, absolutamente obsesionado con la complejidad humana, el amor y la capacidad del hombre de salvarse y condenarse. Wagner decía que Dios no creó el hombre, sino que el hombre creó a Dios. Así que los invitamos a leer, y mucho, antes de poder siquiera tener opinión sobre el tema.
Siendo que el domingo es el día del niño tal vez alguno de Uds se tome el trabajo de, en algún momento, pedirle a sus hijos que escuchen este tema, o alguno parecido. Son algo así como 6:30 minutos. No parece mucho pensando las horas de “las manitas para arriba, y meneo el culito” que escuchan, o les hacen escuchar. Hay que pensar que toda la música comercial y efímera, todo el reggaetón, a sus hijos se la van a meter por el… cráneo a la fuerza, todo el día y todos los días. Tal vez sea buena idea comentarle “Mirá, esto existe. Esto es una cosa que tal vez un día te guste. Escuchalo una vez, nomás”
Probablemente me digan que ni eso es posible. No sé. Todavía puedo creer en los milagros.
El tema empieza con una parte coral pura, luego se van plegando magistralmente los instrumentos hasta llegar a una explosión musical que solo un genio podía lograr. Las maderas (violines, violas, chelos) llevan un sincopado que, si se escucha solo, no puede armonizar nunca con la melodía que lleva el coro. Pruébenlo. NO da. Es imposible. Pero de alguna manera pasa. Y después dicen que Wagner era ateo…
Siempre les digo, mis queridos chichipíos, no busquen a Dios en una zarza ardiente, ni en querubines pasados de peso, ni en una paloma blanca. Dios está en las pequeñas cosas, en los gestos, en los eventos de cada día y muy probablemente, en un momento de escuchar a Wagner.
Por eso, dándole gracias a Dios por los cartoons de Warner, y por Wagner, les deseamos buen fin de semana (largo) y les dejamos el Coro de los Peregrinos en la excelente interpretación de la orquesta DR SymfoniOrkestret de la Radio Danesa, con la dirección de Lawrence Foster.
Peace. Pilgrims. Out.
WEG