Viernes 25 de diciembre de 2020
Tema: Oración del remanso Artista: Jorge Enrique Fandermole
Y este Viernes otra vez vamos a abrevar en esa fuente de inspiración que es nuestro asesor Remera Negra. También es fuente de frustraciones, desprecio, abuso, y en general un maltrato que te dan ganas de abrazarlo. Con un armazón de alambre y una pesa en los tobillos, camino al río más cercano.
Nos copió un post de Facebook (somos viejos, muy viejos, usamos FB) donde aparece la Tuna de Económicas de Sevilla. ¿Y qué es UNA tuna? No es ni un pez ni una planta. En este caso se refiere a un grupo de estudiantes unidos por su afición a la música.
Se los reconoce por su uso de vestimentas tradicionales de la Universidad o Colegio a la que pertenecen, y en su origen se caracterizaban por ser músicos trashumantes.
¿Lo qué? Que eran errantes, que viajaban y se movían mucho.
De ahí surgen diversas teorías sobre la etimología del nombre. Porque se le decía “tunas” a los trabajadores errantes (acá les decíamos golondrinas, ahora les decimos planeros) que se movían al sur de España para la temporada de pesca del atún; que porque eran errantes como el atún, y que viene de la palabra “tunante”, que además de ser el insulto favorito del Coronel Cañones (que el 92,6% de los lectores no tienen IDEA de quién o qué era, googleenlo) se usa para designar a gente que canta y hace ruido a altas horas de la noche.
En fin, lo cierto es que en España, México, y otros países de América (en Argentina nunca lo vimos) se sigue la tradición de armar tunas en las universidades especialmente.
Ver y escuchar esto nos llevó a reconfirmar nuestra opinión que llamar a la colonización hispana/lusitana de América “genocidio” además de otras cosas peores es aplicación del anacronismo histórico pseudoprogre de la peor calaña.
Los pueblos precolombinos:
Tonces, este protestante cultural 100% ADN sajón (probado) es un absoluto defensor de que la llegada de los españoles a América y su implantación del Cristianismo, fue lo absolutamente mejor que le pasó al Continente en su historia.
¿Qué los que estaban no le pidieron a los españoles que vinieran? Busquemos a los primeros que vinieron caminando desde Asia a través del estrecho de Bering que opinan. Ah, no pará…
Pregúntenle a los chinos de la dinastía Jin si ellos les pidieron a los mongoles que fueran a visitar China. Pregúntenles a los babilonios, caldeos, sumerios, hititas, si ellos le pidieron a los macedonios que se dieran una vueltita. El concepto de que de alguna manera América tenía un derecho divino (supongo que otorgado por Huitzilopochtli) a no ser invadida sería risible si no diera tanta lástima.
Y que los americanos precolombinos de alguna manera tenían un derecho que en esa época no tenía ningún pueblo del mundo, a ser inmunes a la invasión de otra civilización más avanzada técnicamente. Eso, mis estimados chichipíos, se llama idealismo anacrónico.
En fin. Habiendo pateado el avispero de la actual cultura pachamamesca de los derechos de los originosecuantos, vamos al tema.
En este hermoso video, la Tuna de Ciencias Económicas y Empresariales de Sevilla (confirmando que los contadores somos la columna vertebral de la civilización occidental) interpreta un hermoso tema, de un argentino.
Al autor el chamamé como género musical no lo mueve mucho, pero en este caso es un chamamé melódico. Si, existe.
Nos copió un post de Facebook (somos viejos, muy viejos, usamos FB) donde aparece la Tuna de Económicas de Sevilla. ¿Y qué es UNA tuna? No es ni un pez ni una planta. En este caso se refiere a un grupo de estudiantes unidos por su afición a la música.
Se los reconoce por su uso de vestimentas tradicionales de la Universidad o Colegio a la que pertenecen, y en su origen se caracterizaban por ser músicos trashumantes.
¿Lo qué? Que eran errantes, que viajaban y se movían mucho.
De ahí surgen diversas teorías sobre la etimología del nombre. Porque se le decía “tunas” a los trabajadores errantes (acá les decíamos golondrinas, ahora les decimos planeros) que se movían al sur de España para la temporada de pesca del atún; que porque eran errantes como el atún, y que viene de la palabra “tunante”, que además de ser el insulto favorito del Coronel Cañones (que el 92,6% de los lectores no tienen IDEA de quién o qué era, googleenlo) se usa para designar a gente que canta y hace ruido a altas horas de la noche.
En fin, lo cierto es que en España, México, y otros países de América (en Argentina nunca lo vimos) se sigue la tradición de armar tunas en las universidades especialmente.
Ver y escuchar esto nos llevó a reconfirmar nuestra opinión que llamar a la colonización hispana/lusitana de América “genocidio” además de otras cosas peores es aplicación del anacronismo histórico pseudoprogre de la peor calaña.
Los pueblos precolombinos:
- tenían esclavos, tomados en sus guerras de expansión y reproducidos como ganado. La enorme mayoría de la gente trabajaba la tierra, toda su vida, sin ninguna oportunidad de alguna vez ser otra cosa
- eran en su mayoría guerreros expansionistas y colonizadores como toda civilización que se precie. La alternativa para cualquier que estuviera cerca era o la sumisión o el extermino. El, irónicamente, genocidio
- estaban estancados en su evolución técnica por su falta de uso de la escritura, de la rueda y de la matemática abstracta
- crearon desastres ecológicos por sobreexplotación de los recursos naturales. No eran para nada una comunión con su entorno y vivían entre pajaritos y florcitas
- no habían desarrollado ni cerca un concepto de derecho humano. Cada uno nacía en un lugar, hacía lo que le decían, a veces se reproducía y luego se moría. Joven. Cualquier intento de salirte de cauce… final sangriento y muy doloroso
- Si los vientos prevalentes hubieran sido de Oeste a Este, por un cambio de los ciclones, como se imaginan que hubiera sido una colonización Azteca, Maya o Inca de Europa o África? Ondas de amor y paz? Papas y maíz para todos y todas? Really?
- Podría seguir durante horas… pero, como corolario:
Tonces, este protestante cultural 100% ADN sajón (probado) es un absoluto defensor de que la llegada de los españoles a América y su implantación del Cristianismo, fue lo absolutamente mejor que le pasó al Continente en su historia.
¿Qué los que estaban no le pidieron a los españoles que vinieran? Busquemos a los primeros que vinieron caminando desde Asia a través del estrecho de Bering que opinan. Ah, no pará…
Pregúntenle a los chinos de la dinastía Jin si ellos les pidieron a los mongoles que fueran a visitar China. Pregúntenles a los babilonios, caldeos, sumerios, hititas, si ellos le pidieron a los macedonios que se dieran una vueltita. El concepto de que de alguna manera América tenía un derecho divino (supongo que otorgado por Huitzilopochtli) a no ser invadida sería risible si no diera tanta lástima.
Y que los americanos precolombinos de alguna manera tenían un derecho que en esa época no tenía ningún pueblo del mundo, a ser inmunes a la invasión de otra civilización más avanzada técnicamente. Eso, mis estimados chichipíos, se llama idealismo anacrónico.
En fin. Habiendo pateado el avispero de la actual cultura pachamamesca de los derechos de los originosecuantos, vamos al tema.
En este hermoso video, la Tuna de Ciencias Económicas y Empresariales de Sevilla (confirmando que los contadores somos la columna vertebral de la civilización occidental) interpreta un hermoso tema, de un argentino.
Al autor el chamamé como género musical no lo mueve mucho, pero en este caso es un chamamé melódico. Si, existe.
Es fantástico ver las diferencias de voces, de preparación, de estudio. Presten atención al pelado de 3:01 Ese tiene estudios. Y no de principios contables generalmente aceptados solamente, de canto también.
Nota aparte para los laúdes. Hay laúdes tenores, bajos… que lujo.
El tema en cuestión es la Oración del Remanso. Obra del santafesino Jorge Enrique Fandermole.
En el tema menciona el Remanso Valerio. Este es un paraje donde hay un pequeño pueblo de pescadores. Hace años las obras hidráulicas de la zona perjudicaron tanto la pesca que el pueblo casi desapareció. Por ello el pueblo se encomendó y le rezó al Cristo Pescador.
En 1995 erigieron un Cristo en piedra al cual le rezaban. Desde entonces a la fecha la pesca mejoró y al regularse el cauce del río la vida en este pequeño pueblo siguió. ¿Mencioné que, yo al menos, prefiero el Cristianismo a la devoción a Huitzilopochtli? Porque los sacrificios humanos me dan cosa, vió?
Jorge Fandermole conoció al Cristo Pescador visitando el pueblo y eso le inspiró el tema. Hoy es un tema fundacional del cancionero argentino.
Dedicado a los amigos santafecinos, y a todos a los cuales nos une una cultura y un idioma. Esperamos que les guste.
En la versión de del autor, Oración del Pescador.
Peace. Remanso. Out.
WEG
Nota aparte para los laúdes. Hay laúdes tenores, bajos… que lujo.
El tema en cuestión es la Oración del Remanso. Obra del santafesino Jorge Enrique Fandermole.
En el tema menciona el Remanso Valerio. Este es un paraje donde hay un pequeño pueblo de pescadores. Hace años las obras hidráulicas de la zona perjudicaron tanto la pesca que el pueblo casi desapareció. Por ello el pueblo se encomendó y le rezó al Cristo Pescador.
En 1995 erigieron un Cristo en piedra al cual le rezaban. Desde entonces a la fecha la pesca mejoró y al regularse el cauce del río la vida en este pequeño pueblo siguió. ¿Mencioné que, yo al menos, prefiero el Cristianismo a la devoción a Huitzilopochtli? Porque los sacrificios humanos me dan cosa, vió?
Jorge Fandermole conoció al Cristo Pescador visitando el pueblo y eso le inspiró el tema. Hoy es un tema fundacional del cancionero argentino.
Dedicado a los amigos santafecinos, y a todos a los cuales nos une una cultura y un idioma. Esperamos que les guste.
En la versión de del autor, Oración del Pescador.
Peace. Remanso. Out.
WEG