Viernes 22 de diciembre de 2017
Tema: There'll be peace in the Valley Artista: Johnny Cash
Peace in the Valley Elvis Presley
Y llega la Navidad. Lo cual siempre parece sorprendernos. Hace tan poco que fue la anterior…
Y para nuestros corresponsales extranjeros, les contamos que en Argentina hubo (como siempre) problemas políticos. Hubo una violentísima manifestación, en verdad varias, pero que llegaron a su clímax el lunes pasado.
En la Plaza de los Dos Congresos, hubo tremendos líos. Durante horas y horas grupos de violentos perfectamente organizados intentaron entrar al Congreso a impedir el tratamiento de una ley. Con cómplices dentro del Congreso que pidieron más de 15 veces que se suspendiera el tratamiento “por la violencia”. O sea, porque afuera hay violencia adentro no se puede tratar una ley.
Hubo más de 130 heridos, en su gran mayoría policías. La policía antimotines soportó más de cuatro (4) horas de pedradas continuas, coktails molotov, bombas de estruendo, balinazos con honda, y en fin lo que se les ocurra. Mientras la orden de una jueza era “no contestar a menos que fuera estrictamente necesario”.
Uds se preguntarán que se trataba. ¿La imposición del estado de sitio? ¿poderes plenipotenciarios para el Presidente? ¿La disolución del Congreso y su reemplazo por una junta de gobierno? ¿El fusilamiento de opositores) No.
Se trataba una fórmula de ajuste.
La forma en que se actualizarán las jubilaciones y pensiones en el futuro. O sea que en vez de usar (A-B1/C – D) ahora se va a usar (A1 – B1 x c – C2). O algo así.
Y esa fue la cruzada de la izquierda argentina y el kirchnerismo estos días. Que no se use una cláusula de ajuste en vez de otra. Como si la actual fuera buena. Y la propuesta muy mala. Vida o muerte. En serio.
Y vimos escenas de salvajismo dignas de la Edad Media. De las cruzadas. Vimos a policías inmolados y (literalmente) lapidados como ofrenda al altar de la “corrección política”. Nunca fue tan cierta la frase, usualmente reservada a los militares, “Their’s is not to wonder why, their’s is but to do and die). Al muere. No hubo muertos de casualidad.
Y si no me creen que fue dantesco:
Y para nuestros corresponsales extranjeros, les contamos que en Argentina hubo (como siempre) problemas políticos. Hubo una violentísima manifestación, en verdad varias, pero que llegaron a su clímax el lunes pasado.
En la Plaza de los Dos Congresos, hubo tremendos líos. Durante horas y horas grupos de violentos perfectamente organizados intentaron entrar al Congreso a impedir el tratamiento de una ley. Con cómplices dentro del Congreso que pidieron más de 15 veces que se suspendiera el tratamiento “por la violencia”. O sea, porque afuera hay violencia adentro no se puede tratar una ley.
Hubo más de 130 heridos, en su gran mayoría policías. La policía antimotines soportó más de cuatro (4) horas de pedradas continuas, coktails molotov, bombas de estruendo, balinazos con honda, y en fin lo que se les ocurra. Mientras la orden de una jueza era “no contestar a menos que fuera estrictamente necesario”.
Uds se preguntarán que se trataba. ¿La imposición del estado de sitio? ¿poderes plenipotenciarios para el Presidente? ¿La disolución del Congreso y su reemplazo por una junta de gobierno? ¿El fusilamiento de opositores) No.
Se trataba una fórmula de ajuste.
La forma en que se actualizarán las jubilaciones y pensiones en el futuro. O sea que en vez de usar (A-B1/C – D) ahora se va a usar (A1 – B1 x c – C2). O algo así.
Y esa fue la cruzada de la izquierda argentina y el kirchnerismo estos días. Que no se use una cláusula de ajuste en vez de otra. Como si la actual fuera buena. Y la propuesta muy mala. Vida o muerte. En serio.
Y vimos escenas de salvajismo dignas de la Edad Media. De las cruzadas. Vimos a policías inmolados y (literalmente) lapidados como ofrenda al altar de la “corrección política”. Nunca fue tan cierta la frase, usualmente reservada a los militares, “Their’s is not to wonder why, their’s is but to do and die). Al muere. No hubo muertos de casualidad.
Y si no me creen que fue dantesco:
Un policía caído trata de ser rescatado por sus camaradas mientras que pacíficos manifestantes en ejercicio de sus derechos constitucionales le clavan un palo y le pegan con un fierro. Siglo XXI en Argentina. Creo que a nadie que conozca nuestro país le puede sorprender el color de las banderas involucradas.
Tal vez este no sea un bien viernes para antes de una Navidad. Es que uno se pregunta: ¿alguna vez habrá paz en este sufrido país? Porque todos en Navidad nos deseamos PAZ, pero todos esos están libres. Y convencidos que lo que hicieron está bien, y listos para hacerlo de nuevo. Por cualquier cosa.
Uno de los que tiraban piedras, se arrepintió de lo que estaban haciendo. Tuvo un minuto de humanidad.
Tal vez este no sea un bien viernes para antes de una Navidad. Es que uno se pregunta: ¿alguna vez habrá paz en este sufrido país? Porque todos en Navidad nos deseamos PAZ, pero todos esos están libres. Y convencidos que lo que hicieron está bien, y listos para hacerlo de nuevo. Por cualquier cosa.
Uno de los que tiraban piedras, se arrepintió de lo que estaban haciendo. Tuvo un minuto de humanidad.
Cabe aclarar que “intelectuales” y políticos K acusaron al pibe de ser “un infiltrado” porque ayudó al policía caído. En serio.
Parece que se han perdido, para algunos, límites atávicos. El ser humano instintivamente reconoce al caído como un límite. Pero tal vez en nuestra
Argentina hasta los límites que tenían los gladiadores en el circo romano se han perdido.
¿Habrá esperanza? Esperando que sí, para esta Navidad traemos un himno de esperanza. Escrito por Thomas A. Dorsey en 1937, es un ícono del góspel.
Y como regalo de Navidad, les traemos dos versiones. Una, por supuesto, de Elvis. Que empezó cantando gospels y nunca dejó de tenerlos en su repertorio.
Y la otra versión, como para tener a dos eternos en esta Navidad, es la de Johny Cash. Que canta junto con The Carter Family, a quién le pensamos
dedicar una semana.
Porque eso es lo que deseamos. Que alguna vez haya para todos paz en la tierra.
Espero que cada uno de Uds. tenga una buena Navidad, con sus seres queridos. Y si en su país, en su ciudad, en su vida tienen paz, cuídenla. Si no la tienen, les deseamos que pronto la tengan, y para siempre.
Peace. Paz. Out.
WEG
Parece que se han perdido, para algunos, límites atávicos. El ser humano instintivamente reconoce al caído como un límite. Pero tal vez en nuestra
Argentina hasta los límites que tenían los gladiadores en el circo romano se han perdido.
¿Habrá esperanza? Esperando que sí, para esta Navidad traemos un himno de esperanza. Escrito por Thomas A. Dorsey en 1937, es un ícono del góspel.
Y como regalo de Navidad, les traemos dos versiones. Una, por supuesto, de Elvis. Que empezó cantando gospels y nunca dejó de tenerlos en su repertorio.
Y la otra versión, como para tener a dos eternos en esta Navidad, es la de Johny Cash. Que canta junto con The Carter Family, a quién le pensamos
dedicar una semana.
Porque eso es lo que deseamos. Que alguna vez haya para todos paz en la tierra.
Espero que cada uno de Uds. tenga una buena Navidad, con sus seres queridos. Y si en su país, en su ciudad, en su vida tienen paz, cuídenla. Si no la tienen, les deseamos que pronto la tengan, y para siempre.
Peace. Paz. Out.
WEG